12 diciembre, 2011

Humala, Belaunde. Perspectiva histórica

"La juramentación… como presidente constitucional de Perú tuvo lugar en medio no solo de la expectativa popular sino de una total y completa legitimidad… Pero ¿Estaba… en condiciones de llevar a cabo la Gran política de Renovación (¿No les suena a "LA GRAN TRANSFORMACIÓN"?) que venía pregonando constantemente desde su primera intentona presidencial?… No hay que olvidar que… asumió el mando flanqueado por un lado, del recelo de numerosos conservadores, inquietados por las iniciativas renovadoras de la campaña y, por el otro, de las esperanzas reformistas de sus miles de partidarios y del pais en general".

El texto de Raul Palacios Rodriguez, tomado de la adenda a la obra de Jorge Basadre "Historia de la República del Perú" con el auspicio del diario El Comercio, podría trasladarse y describir perfectamente el ambiente de la toma de mando de Ollanta Humala como presidente de la nación, y no solo eso, veamos: Belaunde tomó las banderas de diversas luchas populares, con las que recogió para si la voluntad popular, tales fueron, la solución del problema de los yacimientos petroliferos de La Brea y Pariñas y contra el abuso de la transnacional IPC y la otra, la vibrante demanda popular por un plan de Reforma Agraria. En torno a estos puntos se creó tempranamente dentro del gobierno dos facciones, los "Carlistas" conservadores (como Carlos Ferreyros, Carlos Velarde, Carlos Muñoz; muy cercanos a presidente) y los izquierdistas "Termocéfalos". Belaunde, que llegó al poder aupado por los movimientos populares, inclinó rapidamente el fiel de la balanza hacia los "Carlistas" desoyendo las voces de quienes lo llevaron a palacio.

No trabajó por tanto, el tema planteado en la campaña con respecto a la reforma agraria ni solucionó el problema con la International Petroleum Company (IPC), firmando mas bien con ella el ACTA DE TALARA, un contrato a lo menos dudoso para los intereses del pais, que incluia la condonación de impuestos no pagados y por el valor del petroleo sustraido indebidamente (deuda que ascendia a 900 millones de dolares) y mucho mas aún al hacerse publica la desaparición de su pagina 11, que fijaba las condiciones de compra-venta del crudo entre la empresa estadounidense y el gobierno. Luego de eso, entre otros factores que no son motivo de la presente, el descontento popular se apoderó del pais y trajo consigo el debilitamiento y la desestabilización del gobierno. El resultado es bien conocido.

El presidente Humala aparentemente, acaba de hacer caso a los "Carlistas" de su gobierno y ha dejado desconcertados a su amplia base de electores, pierde asi rapidamente su base social, no solo por la conformación del nuevo gabinete, sino por como venia trabajando el problema de la asociación de las: Newmont Mining Corporation, Compañía de Minas Buenaventura e International Finance Corporation – IFC, con la Minera Yanacocha para el proyecto Conga.

El presidente Humala debiera saber leer los acontecimientos pasados y presentes y hacer las correcciones pertinentes para actuar de acuerdo a los intereses de los pueblos del Perú, que fueron los que lo llevaron a palacio como una gran promesa de justicia social y no para hacerle el juego a los poderes facticos que parecen hoy tenerlo rodeado.


Ivan Ortiz

De la Burbuja a la Crisis