12 abril, 2011

Querían un cambio, pues ahí está

Alguien dijo, mientras los chorizos crepitaban en la parrilla, el vino y el pisco corrían generosos y la carne venida de los Estados Unidos se aprestaba a realizar su show del sabor, “¿Cómo puede ser que la gente vote por Ollanta?” Respondí, sin asomo de agresividad y con cierto humor negro, “debe ser porque ellos no comen como vamos a comer nosotros”. Nadie reaccionó y se multiplicaron las sonrisas que alimentaban la esperanza de que ese grandulón hacedor de chistes malos llamado PPK hiciera el milagro. Después de todo el hombre es gringo y como todo gringo puede transformar sus deseos en realidad aunque tenga que pasar por encima de algún escollo. Sino pregunten a Bush o a Obama especialistas en el tema. No fue así y se cumplió la pesadilla de MVLL que, luciendo un dudoso ingenio, hizo una de esas comparaciones abominables que reflejan un desprecio absoluto por los que no piensan como él y que hiere la sensibilidad de los que padecen las enfermedades mencionadas.
En lo que a mí respecta me parece un escenario interesante. Todos hablaban de la necesidad de un cambio pero todos decían votar por aquellos que no solo no harían un cambio, sino que harían aun más duras las condiciones que impone el capital. Cambio, según entiendo, se refería a una mejor repartición de la riqueza. No digo nada del otro mundo, solo un poco más para los que menos tienen como para que la vida de los pobres pueda ser llamada vida. Pero no, hoy por hoy, para los exégetas del neoliberalismo es casi un atentado terrorista insinuar un aumento de impuestos a quienes más ganan o quitarle alguna ventaja económica a quienes están saturados de ellas. “Eso ahuyenta el capital”, dicen a coro. Y la verdad es que el capital primero suma y resta y mientras le siga conviniendo se queda donde está. Solo se trata de saber negociar y para ello es necesaria la presencia de un Estado que, sin destruir los negocios privados, vele por el interés del país.
                                                                                                                     Tomado de PERU21/Sociedad Mar. 12 abr '11

11 abril, 2011

SEGUNDA VUELTA EN PERU


Alan García ha dicho hoy, mezquina y despectivamente, que no le sorprende que un 30% del Perú (porcentaje de Humala) proteste contra su modelo porque no han recibido obras. Ese menosprecio por la visión de los peruanos es el que lo llevó a calificar igualmente de ciudadanos de segunda categoría a los indígenas en la región selvática cuando estos se opusieron a sus planes mercantilistas abusivos

Y es lo que alentó a PPK cuando promovió en 2006 una crisis de la moneda peruana para evitar la victoria de Ollanta Humala, y cuando criticó el apoyo de los peruanos indígenas a Humala con: ”Esto de cambiar las reglas, cambiar los contratos, nacionalizar, que es un poco una idea de una parte de los Andes, lugares donde la altura impide que el oxígeno llegue al cerebro, eso es fatal y funesto…”.
Parece que el país va dándose cuenta que todas esas brujas que vende la derecha en realidad no existen y esta entonces, se va a ver desenmascarada en su faceta mas salvaje, cada vez con mas frecuencia

Humala no tiene para nada asegurada la presidencia después de estos resultados en primera vuelta. Sigo pensando que es muy difícil que en un todos (con plata e influencia mediática) contra uno, pueda vencer. A él le será mas difícil alguna alianza con alguno de sus contendores, avaladores todos ellos del modelo que Ollanta pretende modificar.
No han podido hasta el momento ni los Vargas Llosas, ni los Perez de Cuellar ni los Szyszlos, ni las Rosa Marías, ni las Deltas, ni los Mariateguis, ni los Althaus, ni los Comercios, ni los Correos y un muy largo etc. pero seguro que no han hecho aún, ni de lejos, su mejor (o mas bajo) intento.

Depende ahora de la habilidad de GANA PERU y Ollanta para crear consensos sobre puntos básicos que debieran ser comunes a todos a quienes el verdadero desarrollo del país interesa, de su habilidad para hacer que el país desestime los miedos que la maquinaria financiero-mediática que ya se dejó ver hasta este momento de la campaña, quieren instaurar. Ya desde ayer, voceros de Solidaridad, el mismo PPK de la APGC y el APRA prácticamente descartaron alguna alianza con GANA PERÜ. Perú Posible está en veremos.

Estos resultados son sin embargo –reconocido incluso por el mismo Toledo, ayer- la expresión legitima del gran descontento, que querían esconder el APRA y sus seguidores de modelo por esta forma engañosa y lábil además, de crecimiento sin desarrollo, la cual no podía seguir manteniéndose por mas tiempo sin desenmascararse.
                                                                                                                                   Ivan Ortiz